miércoles, 8 de julio de 2009

fotos de negras desnudas

Por la noche Juan propuso ir a cenar afuera a un lugar donde servían un fantástico asado criollo y que tiene además una muy buena bodega. Al final fuimos solamente Juan, Ana su esposa y yo pues Vero tenía planes con unas amigas que pasarían por ella. Me tranquilicé ya que por lo menos podría disfrutar de la cena sin tener que estar en esa sensación de turbación que me ocasionaba la presencia de Vero.

Disfrutamos de una excelente comida y a los postres Ana dijo que le gustaría ir a algún lugar a tomar unos tragos y continuar la velada de la noche de sábado. Me pareció que interfería en algún plan de la pareja y consideré que mejor sería no acompañarlos de modo que di una excusa cualquiera y regresé a la casa en un taxi dispuesto a acostarme temprano. Llegué a la casa cerca de medianoche, la luz del patio estaba encendida y no se veía signos de que Vero haya regresado ya.

No hay comentarios:

Publicar un comentario